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La historia de La Catedral del Tango

En el corazón de Buenos Aires, una ciudad que late al compás del bandoneón, se erige un lugar especial que encarna el alma tanguera. Conoce la historia de La Catedral del Tango, en una casa de 1880, donde en sus paredes y baldosas se puede ver el paso del tiempo que aún hoy se sostiene.

Este sitio no es solo un lugar de baile, es una experiencia inmersiva que conecta a locales y turistas con la esencia más pura de este género musical tan emblemático del país. Por medio de sus años, ha adquirido importancia, y se ha consolidado su estatus como un faro cultural del tango.

Este es el centro artístico y turístico más importante de Almagro, se dictan clases de tango y folklore, cuenta con decenas de obras de arte, obras de teatro off, danza, varietés, circo criollo, poesía, presentaciones de libros, muestras de fotografías, pintura y escultura. Es un espacio enriquecedor, especialmente para jóvenes, milongueros, artistas callejeros, bailarines y profesionales reconocidos

Sus orígenes se remontan a finales de los años 90, cuando fue inaugurada en un edificio que anteriormente albergaba una fábrica. Este lugar industrial, con sus techos altos, vigas de hierro y paredes descascaradas, fue transformado en un espacio de culto para los amantes del tango. Este aspecto “decadente” y bohemio ha sido cuidadosamente preservado, que mezcla historia y modernidad.

El nombre “Catedral” no es casualidad. Para muchos, el tango es una religión, un estilo de vida, y este lugar se convierte en el templo donde los seguidores del género pueden rendir tributo a sus raíces. Lejos del masivo turismo internacional, acá se siente la esencia sencilla y tradicional del baile.

Qué hacer La Catedral del Tango

Lo que la hace especial, no es solo su historia, sino la amplia variedad de actividades y experiencias para todos por igual. Al ingresar, uno es inmediatamente transportado a otra época: sus luces tenues, muebles reciclados, cuadros desordenados en las paredes y el aire que parece siempre lleno de música y emoción crean una atmósfera mágica.

  • Clases de tango: Para quienes deseen aprender o mejorar su técnica de tango, La Catedral ofrece clases para todos los niveles. Las clases son impartidas por profesores expertos que no solo enseñan los movimientos, sino también la historia y la filosofía del tango.
  • Milongas nocturnas: Las milongas son el alma de La Catedral. Cada noche, el salón se llena de música y parejas que se entregan a la danza. La energía de una milonga es contagiosa: desde los acordes iniciales de una pieza de tango hasta los últimos compases de la madrugada. La sencillez y tradición de La Catedral la hace ser menos pretenciosa. Aunque pueden verse grandes talentos en la pista, el ambiente es inclusivo para que cualquiera se anime a bailar, independientemente del nivel.
  • Eventos y espectáculos en vivo: También es un espacio donde se celebran eventos culturales. A menudo, se presentan orquestas de tango en vivo, tanto de músicos emergentes como de artistas consagrados. Además de la música, también hay espectáculos de danza, noches temáticas y exposiciones de arte, aprende de todos los eventos en La Catedral que podés asistir, lo que la convierte en un epicentro cultural.
  • Gastronomía y ambiente bohemio: Además de la música y el baile, podés disfrutar de una bebida o una comida sencilla. El ambiente de su bar-restaurante es informal y relajado, ideal para tomar un vino o disfrutar de una pizza mientras se observa la magia del tango desplegarse en la pista. 

La tradición de La Catedral del Tango

A lo largo de los años, ha adquirido una importancia cultural que trasciende las fronteras de Buenos Aires. Para los locales, es un símbolo de resistencia cultural. En un mundo donde las modas cambian rápidamente, este lugar se mantiene fiel a sus raíces, con una experiencia auténtica que recuerda la esencia del tango: el barrio, la nostalgia, el amor y el desamor.

  • Centro de encuentro de diversas generaciones: Uno de los aspectos más notables es su capacidad de atraer a personas de todas las edades. Los jóvenes curiosos por conocer más sobre el tango conviven con veteranos del género que han pasado décadas bailando en las milongas porteñas. 
  • Espacio para turistas y locales: A diferencia de otros lugares con espectáculos más orientados al turismo, este sitio invita a sus visitantes a ser parte de la acción. Aquí, los turistas no solo observan el tango, sino que tienen la oportunidad de sumergirse en él, ya sea tomando una clase, participando en una milonga o simplemente disfrutando del ambiente mientras ven a los bailarines moverse con gracia por la pista.
  • Un faro del tango en la era moderna: Lugares como La Catedral del Tango son fundamentales para mantener viva la tradición en la era moderna. En un momento en que la tecnología y las formas de entretenimiento cambian rápidamente, La Catedral sigue siendo un espacio donde se celebra lo atemporal: el arte de la conexión humana a través de la danza y la música.

La historia de La Catedral del Tango, como un refugio cultural, donde la leyenda y pasión por el tango se unen en una atmósfera única, es incomparable. Tanto locales como turistas encuentran, en este lugar, una puerta de entrada al mundo del tango. Si alguna vez vas Buenos Aires y quieres sentir el verdadero pulso de este ritmo, no puedes dejar de visitar La Catedral. Contáctanos para asesorarte y vivir una mágica noche de tradición. 

Catedral del Tango, show donde la música y el baile encienden el alma

Un lugar de encuentro para quienes buscan entrar en el mundo del tango desde una perspectiva bohemia y relajada. Catedral del Tango, show donde la música y el baile encienden el alma, con su propuesta incluye una combinación especial de clases de tango, milongas y espectáculos de música en vivo, sumada a un ambiente auténtico y una oferta gastronómica única en su tipo. Aquí, podés vivir el tango de una forma inclusiva, donde las reglas tradicionales se flexibilizan para dar paso a una experiencia de conexión y disfrute puro.

Milonga y baile libre hasta la madrugada

La milonga en La Catedral del Tango es famosa por su ambiente distendido y tranquilo, a diferencia de muchas tradicionales donde el tango se vive de forma más rigurosa. Aquí, la milonga abre todas las noches alrededor de las 19:00 horas y continúa hasta las 3 o 4 de la madrugada, dependiendo de la cantidad de asistentes. Los mejores días para disfrutar son los martes, jueves, viernes y sábados, cuando el lugar se llena de energía y entusiasmo.

En La Catedral, no hay asientos reservados como en otras milongas formales, lo que permite una dinámica única: las mesas son compartidas entre los visitantes, lo que facilita la interacción y el intercambio entre personas que, aunque no se conozcan, comparten una misma pasión por el tango. El ambiente relajado invita a disfrutar del baile sin importar la experiencia, lo que la convierte en una opción excelente para quienes desean integrarse en la comunidad tanguera porteña sin las formalidades habituales.

Espectáculos de tango en vivo y bandas animadas

Se distingue también por su programación musical en vivo, con bandas de tango que comienzan sus presentaciones, pasada la medianoche, a menudo entre la 1:00 y las 2:00 de la madrugada. Estos espectáculos traen a la pista una vibración única, ya que las orquestas suelen tocar versiones animadas de clásicos del tango, permitiendo a los bailarines expresar todo su sentir al compás de las melodías.

Durante estos espectáculos, se puede ver una combinación de estilos y edades entre el público, desde jóvenes que disfrutan del ambiente bohemio hasta veteranos del tango que encuentran en La Catedral un espacio para recordar los antiguos salones de baile. Estas noches de tango en vivo son especialmente populares los fines de semana, y cada presentación es una invitación a conectar con el género en su expresión más libre y emotiva.

Clases de tango, un espacio para todos los niveles

Cada noche, La Catedral ofrece dos clases regulares de tango, a las 20:00 y a las 22:30 horas. Aunque los horarios pueden variar un poco y rara vez son puntuales, las clases están diseñadas para que tanto principiantes como bailarines experimentados encuentren su lugar en la pista. Los profesores son expertos y, si asisten bailarines de diferentes niveles, suelen dividir la clase en grupos para atender las necesidades de todos. Esta flexibilidad permite que cada persona avance a su propio ritmo, sin presiones.

Además de las clases regulares, existe la opción de clases privadas y precios especiales para grupos, disponibles si se reservan con antelación. Esto hace de La Catedral un lugar ideal no solo para turistas curiosos por aprender los pasos básicos, sino también para grupos de amigos o parejas que deseen una experiencia de tango personalizada. Tras las clases, los asistentes pueden quedarse para practicar en la pista o simplemente relajarse y observar cómo los bailarines más experimentados despliegan su habilidad al ritmo del bandoneón.

La catedral del tango, un lugar único en Buenos Aires

Lo que realmente hace especial a este sitio, es su enfoque accesible y relajado hacia el tango, un arte que en otros contextos suele estar rodeado de rituales y formalidades. En La Catedral, el tango se presenta en su versión más genuina y bohemia, permitiendo a los visitantes vivirlo con una perspectiva fresca y despreocupada. Aquí, no hay una presión por cumplir con las etiquetas del baile, lo que hace que este sitio sea ideal para aquellos que desean disfrutar del tango de forma libre y sin restricciones.

Además, el espacio tiene una estética industrial y descuidada que añade un encanto especial, con paredes llenas de cuadros y objetos vintage que le otorgan un ambiente nostálgico y creativo. Este carácter único lo convierte en uno de los centros culturales más valorados de Buenos Aires, tanto por locales como por turistas, quienes lo consideran un referente de autenticidad y apertura dentro de la escena del tango.

La Catedral del Tango, show donde la música y el baile encienden el alma, es un rincón único de la ciudad que, con su estilo bohemio y espíritu inclusivo, ha sabido ganarse el corazón de quienes buscan vivir el tango de una forma auténtica y accesible. Ofrece una rica combinación de clases de baile, milongas y espectáculos en vivo que lo diferencia de otras tanguerías. Si estás en Buenos Aires y quieres vivir una noche de tango en su máxima expresión, contáctanos para ayudarte con tu visita.

Deleite y pasión con el menú de La Catedral del Tango

¿Sabías que el tango se goza junto a tapas deliciosas? Un festín de sabores es ideal para complacer todos tus sentidos durante las milongas, y acá tendrás deleite y pasión con el menú de La Catedral del Tango. 

Es una casa de tango que destaca en Buenos Aires, no solo por su ambiente bohemio y sus noches de baile, sino también por su propuesta gastronómica única en el mundo de las milongas porteñas, que incluye menú vegetariano. Esto es una rareza en una ciudad famosa por su cultura carnívora, lo que convierte a La Catedral en un sitio único para los amantes del género y de la comida. Además, puedes ir únicamente a disfrutar de un aperitivo o cena, sin necesidad de disfrutar el show de baile.

Un menú alternativo para las milongas

La oferta gastronómica de La Catedral del Tango incluye una variedad de platos sencillos y asequibles. Aquí podrás encontrar opciones como empanadas vegetarianas, pizzas, pastas y algunas alternativas veganas. Además, el menú incluye una selección de bebidas clásicas argentinas como el vino y la cerveza, junto con el tradicional fernet, una bebida icónica en la cultura porteña. Esta propuesta permite a los visitantes disfrutar de una cena ligera y amigable con el medio ambiente antes de comenzar la noche de baile.

La elección de ofrecer comida vegetariana no fue casual, sino una decisión intencional que representa la filosofía del lugar. La Catedral busca abrir un espacio alternativo dentro de la milonga, en el cual tanto los locales como los turistas puedan vivir el tango en un ambiente de inclusión y diversidad. La propuesta vegetariana es, de hecho, una forma de desafiar la norma en una ciudad que se asocia tan fuertemente con la carne.

Pero eso no indica que no hay opciones carnívoras. También cuentan con parrilla tradicional de los mejores cortes. Y por supuesto, las famosas empanadas. Son especialistas en empanadas fritas o al horno de: carne, carne a cuchillo, molleja, pollo, champiñón, espinaca con salsa blanca, jamón y queso, capresse y roquefort y jamón. 

Un sitio de interés cultural alternativo en La Catedral del Tango

El ambiente de La Catedral del Tango es otro de los elementos que la distingue de otras milongas. Sus paredes están cubiertas de obras de arte abstracto y piezas temporales que crean una atmósfera que mezcla lo artístico con lo bohemio. Cada rincón del espacio es único, y tanto las sillas como las mesas son todas diferentes, lo que contribuye a la sensación de estar en un lugar especial. Sobre la barra cuelga el “Corazón del Tango”, una obra imponente de cuatro metros de altura que le da al espacio un toque singular y que se ha convertido en un símbolo del lugar.

El impacto en la cultura porteña y su dedicación a un enfoque alternativo y auténtico han sido reconocidos oficialmente. En 2018, la Legislatura de Buenos Aires declaró a La Catedral del Tango como Sitio de Interés Cultural, un honor que resalta su relevancia y su valor dentro del patrimonio de la ciudad. Este reconocimiento no solo válida la importancia de La Catedral en la escena del tango, sino que también le da un lugar en la historia cultural de Buenos Aires.

Por tanto, vivir el deleite y pasión con el menú de La Catedral del Tango, es un reflejo de la filosofía de sus fundadores, quienes buscan ofrecer una alternativa en el mundo del tango, no solo en términos de ambiente y baile, sino también de gastronomía. Si buscas una experiencia que combine cultura, arte y una propuesta culinaria única, escribí a nuestros asesores a través de showdetango.com, y aventúrate a una noche fantástica.

La sencillez y tradición en La Catedral del Tango

Los grandes escenarios son hermosos y se disfruta la pasión por el baile, pero ¿Dónde se vive la verdadera danza local? En las milongas, con la sencillez y tradición en La Catedral del Tango, es donde surge la magia. Ir a una milonga significa asistir a un lugar para bailar tango. Estos eventos se realizan en salones o clubes y siguen un formato social, con tandas (series de canciones) y cortinas (pausas musicales entre tandas).

La Catedral del Tango es mucho más que una simple tanguería en Buenos Aires; es un sitio con historia y carácter, un verdadero templo de la cultura, donde se rinde homenaje a los dioses del género en una atmósfera bohemia y auténtica. Situada en el barrio de Almagro, es un lugar icónico que buscan una experiencia genuina, alejada del bullicio turístico del centro de la ciudad. Este antiguo granero, que data de 1880 y ha sido transformado en una de las milongas más queridas de la ciudad, cautiva a todos con su mística, su arte y su atmósfera.

Un refugio de nostalgia y tradición

La historia de La Catedral del Tango se remonta a los años de la revolución industrial en Argentina, cuando el edificio cumplía funciones de granero. Con el tiempo, el lugar evolucionó hasta convertirse en un espacio de celebración de la música y danza porteña. Este pasado industrial le otorga un aire desgastado y bohemio que se mezcla con el tango y lo hace aún más atractivo para los puristas y conocedores del género.

Al ingresar, lo primero que se observa es un retrato gigante de Carlos Gardel sobre la entrada, símbolo y figura eterna del tango. Este ícono musical es solo uno de los grandes homenajeados en el lugar; nombres como Aníbal Troilo y Osvaldo Pugliese también son venerados aquí, dioses de esta música impregnada de nostalgia y melancolía, nacida en los barrios más humildes de Buenos Aires a finales del siglo XIX.

Un espacio único, arte y chucherías en cada rincón

La Catedral es también un espacio que abraza la creatividad y el arte en cada rincón. La decoración es un espectáculo en sí mismo, con elementos que parecen sacados de una galería bohemia: bicicletas antiguas, guitarras acústicas desgastadas y un gran corazón rojo hecho de chatarra reciclada y lona plástica, todos colgados de las paredes en una disposición que parece caótica, pero que da vida y carácter al lugar.

El ambiente surrealista se completa con luces de feria multicolores suspendidas del techo, creando un halo luminoso que transforma el lugar en un universo alternativo, donde los visitantes pueden sumergirse en el mundo del tango. Las sillas son todas diferentes, cada una con su historia, y las mesas invitan a los asistentes a compartir el espacio y hacer nuevos amigos, manteniendo el espíritu comunitario de las milongas.

La experiencia de las milongas en La Catedral

Abre sus puertas cada noche para recibir a bailarines y aficionados al tango. Las milongas, que comienzan alrededor de las 19:00 horas, ofrecen un espacio para todos, desde principiantes hasta expertos. A diferencia de otras milongas que pueden ser formales y seguir normas estrictas, La Catedral permite a los bailarines disfrutar de una experiencia más libre y auténtica.

Las clases de tango, que se ofrecen a las 20:00 y a las 22:30 horas, están pensadas para quienes desean adentrarse en el mundo del “dos por cuatro” y familiarizarse con la técnica y los movimientos de esta danza apasionada. Más tarde, alrededor de la medianoche, la pista se convierte en el centro de atención cuando las orquestas de tango en vivo comienzan a tocar. Es el momento en el que el verdadero espíritu del tango florece, y los bailarines avanzados se lanzan a la pista, creando un ballet hipnotizante de tacones y abrazos que capturan la esencia del tango.

Una de las particularidades de La Catedral del Tango es su programación, que incluye noches dedicadas al folclore argentino. Los domingos, la milonga se transforma y rinde homenaje a la música folclórica de las provincias del norte del país, como Misiones, Corrientes, Chaco y Entre Ríos. 

Curiosidades y detalles únicos que definen a La Catedral

  • Fernet y tango: En La Catedral, es común ver a los asistentes disfrutando de un vaso de fernet, un digestivo traído a Argentina por inmigrantes italianos que se ha convertido en una bebida tradicional en el país. El fernet con cola es la bebida preferida de muchos milongueros, quienes la saborean mientras observan o esperan su turno para bailar.
  • El corazón del tango: Una pieza única que simboliza el amor por el tango. Colgado sobre la barra, el “Corazón del Tango” es una obra de cuatro metros de altura hecha de materiales reciclados. Este corazón es una referencia visual al espíritu de La Catedral, un lugar donde se vive con pasión y autenticidad.
  • Reconocimiento cultural: En 2018, la Legislatura de Buenos Aires reconoció a La Catedral del Tango como Sitio de Interés Cultural, destacando su importancia y su contribución al patrimonio cultural de la ciudad. Este reconocimiento oficial refuerza el valor de La Catedral como un lugar esencial para la cultura tanguera de la ciudad.

La sencillez y tradición en La Catedral del Tango hacen, sin duda, el alma del espacio con momentos especiales para vivir el género en Buenos Aires. Con su historia, su ambiente bohemio, y su respeto por la cultura y la innovación, este espacio es relajado, auténtico y con una comunidad apasionada por esta danza. No solo es una invitación a bailar tango, sino también a conocer y sentir una parte esencial de la cultura argentina.

Una Navidad de melodías en la Catedral del Tango

Pasar las fechas decembrinas en Buenos Aires es una experiencia que mezcla tradiciones locales, clima veraniego y el espíritu de una ciudad pasional, especialmente para aquellos amantes del tango que buscan una celebración original. Podés vivir una Navidad de melodías en la Catedral del Tango, una alternativa bohemia y única donde el baile y la tradición porteña se fusionan en una atmósfera mágica. Aquí, entre música, ritmo y una comunidad apasionada, podrás festejar de manera especial

La Catedral del Tango se encuentra en el barrio de Almagro y se ha convertido en una verdadera meca para el tango en Buenos Aires. Con su característico ambiente relajado y sus decoraciones eclécticas, este antiguo granero de la era industrial ha sido adaptado para convertirse en una de las milongas más queridas de la ciudad. Durante la Navidad, este espacio adopta un ambiente aún más acogedor y especial, donde locales y turistas pueden celebrar rodeados de buena música, baile y la calidez de su comunidad. 

¿Por qué pasar la Navidad en La Catedral del Tango?

Es famosa por su decoración, con objetos antiguos, obras de arte y un gran corazón de metal reciclado que cuelga sobre la barra. En Navidad, la magia de este lugar se intensifica, bajo un ambiente festivo diferente a la que se encuentra en otros lugares turísticos. Es el lugar perfecto para quienes buscan un ambiente relajado y genuino.

Durante las fiestas, las milongas en La Catedral mantienen el mismo espíritu de pasión y autenticidad. Bailar tango en Navidad añade un toque especial a la noche, ya que este baile tradicional porteño encarna la pasión y el alma de Buenos Aires. Las orquestas en vivo y los bailarines avanzados crean un espectáculo que no tiene igual y que se disfruta mucho más en la calidez de la Navidad.

También es conocida por ser un espacio donde todos son bienvenidos. Las mesas y sillas compartidas fomentan la interacción, permitiendo a los visitantes conocer a personas de diferentes partes del mundo que se reúnen para celebrar la Navidad con música y baile. No importa si eres principiante o experto en el tango; la comunidad de La Catedral hace que todos se sientan parte de la celebración.

A diferencia de otras milongas tradicionales, La Catedral tiene un enfoque más relajado y sin restricciones en cuanto a vestimenta o normas rígidas de comportamiento. La Navidad aquí se celebra sin las formalidades de otros lugares, lo que permite a los asistentes disfrutar de la noche a su manera. Este espíritu libre y desinhibido es uno de los elementos que hace de este lugar, especial para pasar las fiestas.

Razones para ir a Buenos Aires en Navidad

Pasar la época decembrina en la ciudad, te dará una combinación de verano, tradiciones y festividades al estilo argentino. 

La Navidad en Buenos Aires ocurre en plena temporada de verano, lo que permite disfrutar de actividades al aire libre sin las bajas temperaturas típicas de otras partes del mundo. Es posible pasear por la ciudad, disfrutar de los parques y jardines o incluso organizar una cena navideña al aire libre. El clima cálido también crea un ambiente relajado y animado que añade un toque especial a las festividades.

La cena de Nochebuena incluye platos tradicionales como el vitel toné (ternera con salsa de atún y alcaparras), ensaladas frescas y panettone. También se disfruta de bebidas refrescantes como la sidra y el champán, que se comparten en grandes mesas familiares. Experimentar esta gastronomía en Buenos Aires es una oportunidad para conocer la fusión cultural que define a la ciudad.

Aunque Buenos Aires no tiene la nieve ni el clima invernal de otras ciudades, se viste de Navidad con decoraciones y luces en las principales avenidas y plazas. Lugares como la Avenida 9 de Julio y la Plaza de Mayo se iluminan con luces navideñas que crean un ambiente festivo y único. Además, muchas tiendas y centros comerciales también se decoran, ofreciendo a los visitantes una experiencia navideña al estilo argentino.

Consejos para disfrutar de la Navidad en La Catedral y Buenos Aires

  • Reservar con anticipación: Aunque La Catedral es un lugar abierto y sin demasiadas formalidades, en épocas festivas puede llenarse rápidamente. Reservar o llegar temprano es recomendable para encontrar un buen lugar y asegurar una noche sin contratiempos. Escribe a nuestros asesores para ayudarte y asesorarte de la mejor manera.
  • Vestimenta cómoda: El clima veraniego de Buenos Aires permite a los visitantes vestirse de manera casual y cómoda. Es una buena idea llevar ropa ligera y zapatos cómodos para disfrutar tanto del baile como del paseo por la ciudad.
  • Explorar la ciudad de noche: La vida nocturna en Buenos Aires es animada, y en Navidad ofrece una experiencia especial. Los barrios como Almagro, Palermo y San Telmo tienen opciones de bares y restaurantes para continuar la celebración después de una noche de tango en La Catedral.

Celebrar una Navidad de melodías en la Catedral del Tango es la mejor alternativa para pasar las fiestas. Rodeados de música, baile y un ambiente bohemio, es todo lo que se puede pedir para recibir el espíritu de Santa.

Despedida de fin de año en La Catedral del Tango

¡Viví una despedida de fin de año en La Catedral del Tango! Un momento lleno de vida, tradición y un toque de autenticidad que hace de la ciudad un lugar perfecto para dar la bienvenida al nuevo año. Imagina un nuevo año con una milonga icónica, que se ha convertido en un verdadero templo del tango porteño. Con su ambiente bohemio, su decoración ecléctica y su acogedora comunidad, celebrar el Año Nuevo en La Catedral del Tango es una manera diferente y única de conocer la cultura argentina, acompañado de buena comida y bebidas.

Situada en el barrio de Almagro, es una de las milongas más queridas y auténticas de Buenos Aires. Ha mantenido su esencia rústica, con paredes de ladrillo expuesto, arte y decoración vintage que van desde bicicletas y guitarras antiguas hasta un enorme corazón rojo hecho de metal reciclado, conocido como el “Corazón del Tango”. Este ambiente hace un lugar ideal para una celebración alternativa de Año Nuevo, lejos de las formalidades y con un toque genuino de la cultura porteña.

¿Por qué pasar Año Nuevo en La Catedral del Tango?

Este espacio bohemio, decorado con arte, objetos antiguos y una iluminación tenue, se transforma en Año Nuevo, ofreciendo una atmósfera especial y acogedora. Aquí se respira un ambiente relajado y auténtico, muy diferente de los eventos masivos o formales, lo que permite disfrutar de una noche de tango y celebrar sin restricciones.

La noche de Año Nuevo en La Catedral ofrece un espectáculo de tango en vivo que es inolvidable. Desde la medianoche, las milongas y las orquestas en vivo invitan a bailar y celebrar al ritmo del “dos por cuatro”. Incluso si no se es un experto en tango, el ambiente es acogedor y permite a principiantes y aficionados compartir la pista y disfrutar de una experiencia típica de Buenos Aires.

Además, esta casa de tango es famosa por su ambiente inclusivo y amigable, lo cual es especialmente agradable en una noche festiva. En Año Nuevo, el lugar se llena de una mezcla de locales y turistas, creando una comunidad multicultural donde se puede conocer a gente de diferentes partes del mundo y compartir la emoción de empezar un nuevo año en una atmósfera de camaradería y alegría.

Al contrario de otras celebraciones de Año Nuevo que requieren códigos de vestimenta o cenas formales, La Catedral del Tango invita a celebrar sin reglas ni etiquetas. Es un espacio libre y relajado donde los asistentes pueden bailar, disfrutar y vivir el momento sin preocuparse por formalidades. Esta libertad es parte del encanto del lugar y una de las razones por las que tantas personas eligen recibir el año aquí.

Curiosidades de Año Nuevo en Buenos Aires

Pasar el 31 de diciembre en Buenos Aires es muy especial, no solo por el tango y la comida, sino también por las tradiciones y costumbres que le dan un toque único. 

  • Fuegos artificiales en toda la ciudad: Al llegar la medianoche, Buenos Aires se ilumina con fuegos artificiales que se pueden ver en distintos puntos de la ciudad. Familias y amigos salen a la calle para celebrar y observar el espectáculo de luces en el cielo. Aunque hay varios puntos estratégicos para verlos, como Puerto Madero o la Costanera, prácticamente desde cualquier lugar de la ciudad se pueden apreciar los fuegos artificiales que marcan el inicio del nuevo año.
  • El brindis con sidra y pan dulce: En Argentina, la sidra es una bebida típica de las fiestas de fin de año y el Año Nuevo no es la excepción. Se brinda con sidra o champán, acompañados de pan dulce (panettone) o turrones, lo que representa abundancia y buenos deseos para el año que comienza. Esta tradición se disfruta en familia, en reuniones de amigos o en eventos como los de La Catedral del Tango.
  • Las cábalas y supersticiones: Como en muchos países, en Buenos Aires también existen varias cábalas para recibir el Año Nuevo. Algunas personas usan ropa interior de color rojo o amarillo, que simboliza el amor y la prosperidad. Otros se suben a una silla o dan vueltas alrededor de la mesa con una maleta, en un ritual que supuestamente atraerá viajes y nuevas aventuras para el año siguiente.
  • Las fiestas en la calle: Después de la medianoche, muchas personas salen a la calle a celebrar en grupo. En barrios como Palermo, San Telmo y Almagro, es común ver a personas compartiendo música y brindis en plazas y esquinas. Este espíritu comunitario también se siente en La Catedral del Tango, donde la noche sigue con música, baile y celebración hasta altas horas de la madrugada.

Consejos para disfrutar del Año Nuevo en La Catedral del Tango y Buenos Aires

  • Llegar temprano o hacer reservación: Durante las celebraciones de Año Nuevo, La Catedral del Tango suele estar bastante concurrida, así que es recomendable llegar con anticipación o hacer una reserva para asegurar un buen lugar. Y nosotros te ayudamos, contactá con nuestros especialistas para recibir toda la asesoría que necesitas. 
  • Ropa cómoda y casual: Debido al clima veraniego, la mejor opción es vestirse de manera cómoda y casual. Se recomienda llevar ropa ligera y zapatos cómodos para disfrutar tanto del baile como de las festividades en la ciudad.
  • Recorrer los barrios festivos: Después de La Catedral, es buena idea explorar otros puntos de Buenos Aires donde la fiesta continúa, como Palermo o San Telmo, que cuentan con bares y lugares abiertos hasta el amanecer.
  • Tomar precauciones con el transporte: Durante la noche de Año Nuevo, el transporte público en Buenos Aires puede estar limitado, por lo que se recomienda prever opciones de movilidad, como taxis o aplicaciones de transporte, especialmente si se planea regresar después de la medianoche.

Una despedida de fin de año en La Catedral del Tango es una excelente alternativa a estas festividades, rodeada de tango, arte y buena compañía, este espacio es el lugar ideal para recibir el nuevo año de una manera diferente y memorable. 

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